Los Cónfluxes Peninsulares

La Keltiberia es una región en constante cambio, habitada por tribus nómadas de hechimantes debido a la Maldición de Durato, que les impide asentarse. Esta realidad ha dado forma a su organización social basada en parentesco y su estilo de vida militarizado. A pesar de la falta de unidad política, valoran la destreza militar. Las leyendas de origen fortalecen su sentido de comunidad. La vida nómada ha desarrollado su adaptabilidad y resistencia. Sin embargo, también es una tierra marcada por la crueldad y la necesidad de mantener alianzas para sobrevivir.

La Federación del Manzanares, formada en 1986 por la unión de varios cónfluxes de Madrid, refleja una diversidad de enfoques políticos y sociales. Los cónfluxes como Serrano y Los Billares representan facciones diferentes, creando tensiones internas. A pesar de esto, la Federación es una fuerza política influyente en la comunidad mágica, extendiendo su influencia a otros cónfluxes. La adaptabilidad y versatilidad de la Federación son sus activos clave, permitiéndole enfrentar desafíos cambiantes y convertirse en una potencia política en la región mágica.

La Carbajala, un conflux en zonas de fácil acceso solo para aquellos que conocen los senderos mágicos, es renombrado por su atención y curación de heridas y enfermedades mágicas. La tradición del hospital mágico se remonta a épocas antiguas, aprovechando las propiedades curativas de la región. Su organización se centra en habilidades y experiencia en curación mágica. Además de su papel como hospital, La Carbajala es un centro de investigación en magia curativa y colabora estrechamente con la Orden de Guardianes para su protección. Rumores sugieren habilidades de defensa mágica entre sus miembros.

Helmántica, conocida por su prestigio académico y tradiciones universitarias, también destaca en el mundo mágico. El conflux helmántico, menos académico que Piedralberche, se especializa en magia emocional que se integra en las festividades de la ciudad para canalizar su energía. La "Ciudad de los Festejos" atrae constantemente la atención de la Orden de Guardianes. Aunque algunos cónfluxes sugieren su tutela, Helmántica defiende su autonomía y celebra su cultura única. Los jóvenes hechimantes pueden experimentar y desarrollar sus habilidades sin restricciones académicas.

El Conflux de Llevant, conocido por su historia desafiante a la Tradición del Oro, alberga gremios de sigaldros que prosperaron gracias al comercio marítimo y se convirtieron en dinastías. Estos gremios siguen una estructura jerárquica basada en la riqueza acumulada, lo que a menudo perpetúa la posición de las familias adineradas. La región también enfrenta tensiones con las tribus keltíberas debido a la búsqueda de artefactos y mercancías. Los propios gremios luchan por el poder y la riqueza, creando intrigas y cambios constantes en el equilibrio de poder. El Conflux de Llevant se mantiene como un epicentro de actividad, donde la magia y el comercio se entrelazan en busca de riqueza y prestigio.

El Castillo de Loarre, una de las prisiones más temidas de la sociedad hechimante, encierra a quienes violan reiteradamente las Tradiciones. Situado en un lugar aislado y vigilado por la Orden de Guardianes, es conocido por sus condiciones extremadamente duras. Con celdas pequeñas y lúgubres, condiciones insalubres y violencia entre los presos, la vida aquí es desoladora. Se dice que una entidad oscura, tal vez el espíritu de un prisionero fallecido o una criatura de las Dimensiones Mazmorra, aterroriza a los reclusos. La fuga es casi imposible, y solo cumpliendo la pena completa se puede salir.

El Dolmen de Viera, en Antequera, es una antigua confluencia marcada por rituales astronómicos y magia antiquísima. El cónflux se que se ha formado a su alrededor es el decano de los asentamientos de hechimantes peninsulares. Su magia se centra en la conexión con antiguas maravillas que unen la tierra y el cosmos. Ha presenciado innumerables amaneceres y crepúsculos, y su historia se refleja en petroglifos encriptados. Aunque pequeño, destaca por celebraciones ancestrales, especialmente durante los equinoccios de primavera y otoño, cuando hechimantes se reúnen para ser bañados por la luz del sanctasanctórum. El Conflux de Viera es un refugio de magia telúrica y tradiciones centenarias.

El Sacromonte, en Granada, alberga un cónflux de alquimia y hermetismo que fusiona influencias judías, musulmanas, cristianas y romaníes en un tapiz mágico único. La alquimia granadina se especializa en sanación, influenciada por las antiguas prácticas musulmanas. Más allá de la sanación individual, promueve la colaboración entre diversas comunidades mágicas y la investigación alquímica. Leyendas como tesoros ocultos y los Libros Plúmbeos protegidos mantienen su misterio. La colaboración con la Orden de Guardianes garantiza su seguridad mientras florece como un faro de conocimiento y sanación en el atardecer mágico del Sacromonte.

El Conflux de las Rías Baixas está dedicado al comercio, al diálogo y a la conexión. Todo este tiempo han intentado mantenerse al margen de la guerra, y ser un espacio de calma y no violencia. Tiene una población flotante de gente que está de paso, tanto mundanos como hechimantes. Forman parte de una comunidad de confluxes a lo largo de la costa atlántica. La energía mágica en este conflux es más poderosa de lo que pareciese a juzgar por las lineas ley sobre las que está ubicado, pero los miembros no ofrecen ninguna salvo los rituales y festividades que celebran de forma habitual. Tampoco sobre los hechimantes que acuden atraídos por esta energía y en ocasiones desaparecen sin dejar rastro. 

El Cónflux de las Set Fonts, escondido en los bosques de Beget, alberga siete fuentes elementales que sostienen el equilibrio mágico. La historia oficial habla de una hechimante solitaria que las creó, pero en realidad fue una obra compartida con un licántropo y su hijo híbrido. Para protegerse del estigma, sus descendientes ocultaron este linaje. Hoy, la familia sigue custodiando el lugar en secreto. Las Set Fonts encarnan la fusión de lo arcano y lo salvaje, y quienes descubran su verdad podrían desatar antiguas tensiones y cambiar el rumbo de la sociedad hechimante.

El Cónflux de El Escorial se asienta sobre una confluencia arcana ancestral, aprovechada por conjuradores de la Corte para fundar el Monasterio como sello y canal ritual. Durante siglos, Custodios y Expiadores han mantenido pactos oscuros y penitencias mágicas para contener su poder. Sin embargo, recientemente, una brecha desde una de las dimensiones mazmorra del Baator desgarró sus protecciones, desatando horrores que casi consumen el laberinto subterráneo. Aunque la amenaza fue contenida tras tres días de duros combates y cuantiosas pérdidas, el equilibrio se ha roto. El Escorial ya no guarda sus secretos: ahora los susurra, ansioso por ser liberado.

Tras dos siglos de castigo, el linaje de los Álvarez de Toledo ha recuperado la confluencia de Campo Charro. Su reapertura marca el regreso de una fuerza mágica contenida y estratégicamente relevante. Hoy, Campo Charro se erige como el cónflux más alineado con los intereses del Cónclave Peninsular: sobrio, pragmático y profundamente político. Actúa como contrapeso a la efervescente y emocional Helmántica, ofreciendo estabilidad institucional y una visión centrada en el orden arcano y la diplomacia. Aunque su pasado aún pesa, Campo Charro vuelve al tablero como una pieza clave en el equilibrio peninsular.

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