Imagina nuestro mundo, tal y como es a día de hoy. Ahora imagina que la magia es real.
El mundo mágico existe entre las sombras del nuestro, escondido para los mundanos, pero abierto para los neófitos. Es un mundo de tradición y antiguos linajes, de misterios y secretos. Un mundo de sabios hechimantes, poderosas arcanistas, y sombríos conjuradores.
Teoría de la Magia se enseña en antiguos castillos a estudiantes que preferirían seguir mirando Pentagram. Mientras algunas familias pueden trazar su linaje orgullosamente a hechimantes tan famosos como Morgana Le Fey o la Sibíla de Delfos, poderosos evocadores brotan en los suburbios de Shangai o en el casco histórico de Cáceres.
En Europa, a las sociedades mágicas se las denomina cónfluxes, comunidades de tamaño pequeño a mediano que existen en los márgenes de la sociedad mundana - o camufladas en ella. Los cónfluxes Europeos son increíblemente variados y polifacéticos, y mientras un cónflux puede funcionar como una democracia liberal típica, muchos otros tienen formas de gobierno más exóticas.
Las confluencias son lugares mágicos de alta concentración de energía arcana, que suelen estar vinculadas a ubicaciones geográficas específicas. En algunas confluencias, como montañas o cuevas, se pueden encontrar piedras o cristales imbuidos de energía teúrgica, que son altamente valorados por los hechimantes por su capacidad para potenciar hechizos y rituales. En otros casos, una confluencia puede estar centrada en un antiguo árbol o un manantial que emana poder arcano, o incluso una región marina donde habitan criaturas sobrenaturales. Estas confluencias son consideradas sagradas por los hechimantes y son lugares de gran reverencia y respeto.
Debido a la alta concentración de magia en estas confluencias, muchos hechimantes y otros seres mágicos son atraídos a ellas y se establecen en comunidades cercanas. Estas comunidades son conocidas como cónfluxes y están muy definidas por su carácter y la naturaleza de la confluencia en la que se encuentran. Los cónfluxes son lugares donde los hechimantes interactúan y comparten conocimientos, rituales y tradiciones mágicas, formando una comunidad que se rige por normas y expectativas culturales propias.
Cada cónflux tiene su propia identidad y características únicas. Por ejemplo, en un cónflux como Piedralberche, que alberga una escuela de magia, los hechimantes que viven allí suelen estar involucrados en la enseñanza y práctica de la magia, compartiendo conocimientos y experiencias entre ellos. Este tipo de cónfluxes suelen tener una estructura jerárquica y una organización más formal, con líderes y maestros que guían a los aprendices en su camino mágico.
Por otro lado, en un cónflux centrado en la atención médica, los hechimantes pueden trabajar en conjunto para cuidar de las personas que viven en la zona, utilizando sus habilidades mágicas para sanar enfermedades y heridas. Estos cónfluxes pueden tener un enfoque más cooperativo y colaborativo, con una fuerte ética de cuidado y servicio a los demás.
Además, en muchos cónfluxes existen guardianes locales, hechimantes o seres mágicos que son responsables de mantener la integridad y el equilibrio de la confluencia. Estos guardianes son considerados protectores de la confluencia y velan por el cumplimiento de las tradiciones y regulaciones propias de la comunidad. Su papel es crucial en el mantenimiento de la armonía y la seguridad en el cónflux.
Es importante tener en cuenta que no todos los hechimantes viven en cónfluxes. Sin embargo, la existencia de cónfluxes y su influencia en la comunidad mágica es reconocida y respetada por todos los hechimantes, ya que representan lugares de gran poder y sabiduría.
En algunos casos, los cónfluxes pueden tener una estructura más burocrática y autoritaria, con una organización gubernamental que supervisa y regula las actividades mágicas en la zona. Estos cónfluxes pueden tener reglas estrictas y regulaciones para garantizar que la magia se utilice de manera responsable y ética. Por ejemplo, puede haber restricciones en el uso de ciertos tipos de magia, o requisitos de licencia y registro para los hechimantes que deseen practicar en la zona.
En contraste, otros cónfluxes pueden tener una estructura más descentralizada y enfocada en la autonomía individual de los hechimantes. Aquí, se puede promover la experimentación y la innovación en la magia, permitiendo a los hechimantes explorar y desarrollar nuevas técnicas y enfoques en su práctica mágica.
Además de la práctica de la magia, los cónfluxes también pueden ser centros de investigación y estudio en diversas áreas del conocimiento arcano. Pueden albergar bibliotecas y archivos con antiguos tomos y pergaminos que contienen valiosos conocimientos mágicos, así como laboratorios donde se realizan experimentos y estudios en diferentes disciplinas mágicas, como alquimia, astrología o geomancia.
Los cónfluxes también son lugares de encuentro social para los hechimantes, donde pueden intercambiar ideas, discutir teorías mágicas, compartir experiencias y establecer conexiones con otros hechimantes de todo el mundo. Estos encuentros se dan en forma de festivales, congresos, encuentros académicos o simples reuniones informales en tabernas y posadas.
Sin embargo, aunque los cónfluxes son en su mayoría lugares de armonía y colaboración, también pueden haber conflictos y tensiones entre los hechimantes que los habitan. Las diferencias de opiniones, rivalidades y disputas surgen a menudo debido a diferencias de enfoque en la práctica mágica, divergencias filosóficas o conflictos de intereses. En tales casos, los guardianes y líderes de la comunidad tienen el deber de intervenir para resolver los conflictos y mantener la paz y la armonía en el cónflux.
Además, los cónfluxes también pueden enfrentar desafíos externos, como amenazas de fuerzas oscuras o la interferencia de aquellos que buscan explotar o controlar el poder mágico de la confluencia en beneficio propio. En tales situaciones, los hechimantes que viven en el cónflux deben unirse y defender su hogar, utilizando su magia para proteger y preservar la integridad de la confluencia.
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