En la Academia Piedralberche, los hilos del conocimiento mágico se entrelazan con los secretos más profundos del universo, se asientan las leyes que gobiernan la vida de sus habitantes. Estas leyes, sagradas y ancestrales, han sido forjadas a lo largo de los siglos para preservar la integridad de la confluencia y mantener el equilibrio entre el mundo mundano y el mundo mágico. A través de estas normas, los miembros de la academia juran lealtad, respeto y protección hacia su sagrada misión, asegurando que el poder que reside en Piedralberche permanezca oculto y seguro para las generaciones venideras.
Ningún estudiante o profesor revelará la existencia de la Academia Piedralberche a mundanos o ajenos. La divulgación de esta información privilegiada está sujeta a severas sanciones.
Los miembros de la Academia Piedralberche no interferirán en asuntos mundanos, a menos que sea necesario para proteger la confluencia o a ellos mismos.
Los miembros de la Academia Piedralberche se mantendrán leales a la institución y a sus compañeros, sin importar las circunstancias.
Se espera que todos los miembros de la Academia Piedralberche se traten mutuamente con respeto y consideración, independientemente de su linaje o rango.
Los estudiantes y profesores de la Academia Piedralberche respetarán y seguirán las tradiciones establecidas de la institución, que incluyen sus rituales y ceremonias.
Se espera que los miembros de la Academia Piedralberche sigan un código de vestimenta apropiado para cada ocasión y muestren el decoro que se espera de nuestra institución.
El Área de Altas Energías de la Biblioteca y los Subsótanos están estrictamente prohibidos para todos los estudiantes, a menos que cuenten con autorización explícita.
Es responsabilidad de todos los miembros de la Academia Piedralberche proteger y preservar el secreto y el poder de la confluencia. Cualquier intento de revelar o comprometer la confluencia está estrictamente prohibido y puede resultar en severas acciones disciplinarias.
Las violaciones graves de las leyes de la Academia Piedralberche serán juzgadas por la Asamblea, presidida por la Rectora y los Tutores. El acusado tiene derecho a reclamar que hasta un miembro de cada cofradía ejerza como su defensor. La culpabilidad o inocencia se decidirá por mayoría simple de los votos de la asamblea, y la forma del castigo corresponderá a la Rectora.